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CS presentó un 0,66 % de lisina y 0,37 % de aa azufrados. La digestibilidad aparente de CS fue de 71 % para la materia seca, 50% para la proteína bruta y 74 % para la fibra bruta.
En el primer experimento se utilizaron 72 cerdos con un peso medio de 29,6 kg que se alimentaron 42 días con piensos que contenían 0, 6 y 10% CS que reemplazaba al ST. No mostraron diferencias en cuanto a ganancia de peso ni en conversión.
En el segundo experimento se alimentaron 60 animales (64,5 kg de media) con piensos que contenían un 12 % de CS ó ST durante 41 días. El espesor de la grasa dorsal ni la superficie del lomo difirieron entre los dos grupos.
En un tercer experimento de dos semanas, se permitió que 80 cerdos eligiesen entre un pienso con 10 % de CS ó un 10 % de ST. Consumieron la misma proporción.
En conclusión, puede introducirse un 10-12 % de cascarilla de soja en las dietas de cerdos de engorde, substituyendo el salvado de trigo, sin afectar la palatabilidad de la dieta ni el rendimiento de los animales.
KM Chee et al. Australian J. Animal Sci. 2005. 18(6): 861-867